La Dolce Vita
Después de siete años sin volver a Italia no me
acordaba de lo auténtico y único de nuestro país vecino. Pensé que se me había
olvidado el ruido de los motorinos por la calle, las sirenas o los gritos
de "ciao ragazzi"
o "dai..."
Pero
si, no hay como volver un fin de semana a Milán para regresar al pasado y
sentirte como Anita Ekberg en La dolce vita!
No será como en Roma,
pero la vecchia Italia también se encuentra en la capital del norte. En cada
esquina, en la metropolitana, los tranvías, las plazas...volver a Milán me ha traído
un montón de recuerdos que tenia olvidados. Olores que solo salen de trattorias
e forni a legna...
Milán, la ciudad
de la moda. Moderna, cosmopolita, con las mejores marcas y diseñadores únicos,
los mejores clubs, museos y terrazas para tomar el aperitif. Cualquiera pensaría
que se trata de una ciudad limpia, nueva, fresca...
Contrasta con la realidad,
una ciudad que conserva los empedrados por todas las calles...
Los tranvías originales y los palacios...
Los patios interiores abiertos al publico e incluso los canales diseñados por el mismísimo Leonardo Da Vinci!! El Naviglio Grande fue una de sus creaciones! Muy bonito de visitar, especialmente el último domingo de mes, cuando ponen alrededor del
canal un mercadillo de antiguedades que es una autentica preciosidad. Muy
recomendable!
Uno no
se puede ir de Italia sin probar il Caffè,
un sabor único. Pruebas un espresso
en Londres y no te sabe igual! El amargo en Italia no sabe tanto... sabe più dolce!
Viaje de regreso
al pasado, muy bien acompañada. Refresco mis recuerdos al mismo tiempo que añado a mi álbum unos nuevos que contaros.
Unos nuevos contigo!
Gracias por este viaje!